CIENTOS DE MILES DE ALMERIENSES PELEAN CONTRA LA CONSTRUCCIÓN DEL HOTEL EN LOS GENOVESES
El GEM denuncia que las administraciones hacen trampas para dar vía libre a cualquier desmán urbanístico y/o ambiental.
Poco a poco los acontecimientos se van produciendo en ese afán por construir y en dar el visto bueno a la construcción de un hotel de 4 estrellas, 30 habitaciones, aparcamientos y piscina en la Hacienda El Romeral, más conocido como Cortijo Las Chiqueras, frente a la impresionante bahía de Los Genoveses, en pleno corazón del Parque Natural de Cabo de Gata-Níjar, considerado Reserva de la Biosfera por parte de la UNESCO.
El último episodio de este goteo que va enlazando fases en la tramitación del expediente ocurría esta pasada semana con la celebración de un Pleno por parte del Ayuntamiento de Níjar en el que se aprobó admitir a trámite el proyecto de construcción del hotel, convertido desde hace años en una de las más graves amenazas para el Parque Natural.
La tibieza con la que se ha manejado en estos últimos años incluso la Junta de Andalucía nos hace temer a los grupos ecologistas que encabezamos el movimiento de rechazo a este descabellado proyecto no ha hecho sino arrojar más incertidumbres e incrementar el riesgo de que finalmente en una zona protegida como es el Cabo de Gata se admita la aparición de hoteles, actuación de dudoso encaje en la legalidad vigente y que atenta contra la integridad de un espacio único en España y Europa.
La última resolución conocida al respecto fue la que otorgaba la autorización ambiental unificada al proyecto de Las Chiqueras, con algunas condiciones, entre ellas la necesidad de obtener la declaración de interés público para esta iniciativa de la empresa promotora, Torres y González, cuya obtención depende del Ayuntamiento nijareño.
Desde el Grupo Ecologista Mediterráneo observamos con creciente preocupación cómo las administraciones en general y los ayuntamientos en particular se apoyan en cuestiones de esta índole para saltarse las normas, esas leyes aprobadas por ellos mismos en muchas ocasiones. La cuestión es que, pese a la normativa legal, con mas frecuencia de la deseable dejan la puerta abierta a lo que no deja de ser incumplimiento de las normas y leyes de protección.
Así ocurre con la declaración de ‘interés público y social’, a la que se recurre cuando se quieren soslayar reglas y normativas de obligado cumplimiento para todos, pero parecería que son menos obligadas para iniciativas privadas en las que no existe ese supuesto interés general, sino más bien un evidente interés económico de los promotores.
Algo parecido a lo ocurrido con la celebración del Dreambeach junto a la urbanización de El Toyo, que también encuentra resquicio cuando se concede el calificativo de ‘evento excepcional’ a un festival que incumple varias de las normativas en temas tan sensibles como los ruidos, la contaminación lumínica, la movilidad o la salud de las personas. La trampa que las administraciones han previsto es la de suspender temporalmente el cumplimiento de las normas para permitir la celebración del macroconcierto. A eso se le llama ‘morro’.
Entendemos que a la hora de determinar el ‘interés público y social’ de un proyecto debería tenerse en cuenta la valoración de los ciudadanos, de la mayoría de los ciudadanos y creemos que en este caso del hotel en Las Chiqueras en la zona de Los Genoveses, se está despreciando olímpicamente el hecho de que cerca de 300.000 personas, la mayoría de ellos almerienses, hayan firmado en contra de ese proyecto y rechazado, de facto, que pueda ser beneficiado con la declaración de interés público.
Por último los colectivos que estamos intentando llevar cordura a la gestión de un Parque Natural tan emblemático para Almería como es el de Cabo de Gata-Níjar (Grupo Ecologista Mediterráneo, Amigos del Parque, Plataforma Genoveses sin Hotel, entre otros), esperamos que impere la cordura y las administraciones pongan freno a este y a otros proyectos que no tienen cabida en un verdadero modelo turístico sostenible. Sin duda las agresiones a los espacios naturales protegidos no caben en un modelo que se abre paso decididamente en torno al respeto por la naturaleza y sus valores.
Almería, 30 de Julio de 2024
GRUPO ECOLOGISTA MEDITERRÁNEO