Así, las dos entidades aúnan esfuerzos para poner en marcha conjuntamente este proyecto de investigación, que estará desarrollado por Antonio Rubio, responsable del proyecto Biodiversidad Domesticada del GEM y por la investigadora Inmaculada Rodríguez, del área de Agroindustria y Calidad Alimentaria del centro Ifapa Rancho de la Merced, en Jerez de la Frontera (Cádiz).

Las variedades actuales de uva de mesa se caracterizan por un alto grado de dinamismo y constantemente se introducen nuevas variedades para satisfacer los gustos de las personas que las consumen. Pero existen otras muchas variedades tradicionales que se han cultivado tradicionalmente durante siglos en pequeñas explotaciones agrarias y que se destinan para el consumo doméstico. El trabajo en estas explotaciones familiares ha permitido la conservación de parras antiguas de generación en generación, lo que a su vez ha preservado múltiples genotipos que de otra manera podrían haber desaparecido.

Tras recopilar información de parraleros y parraleras locales en múltiples visitas a todos los rincones de la provincia de Almería, gracias a este trabajo se ha conseguido la localizar numerosas parras centenarias cultivadas de forma tradicional. En concreto, se han prospectado y recolectado 228 parras antiguas en Almería, principalmente en zonas relativamente aisladas, lo que ha permitido la conservación de estos especímenes.

De entre todo este material recolectado, se han seleccionado unos 80 individuos que han sido plantados en el parral que el GEM tiene en Terque, Así mismo cada año se hace una selección de variedades que son reproducidas en un vivero, en colaboración con la Diputación de Almería, y habitualmente en el mes de marzo se lleva a cabo un reparto de parras con carácter gratuito entre las personas interesadas, todo ello como forma de poner en valor y difundir un pedazo de la ‘memoria verde’ de una provincia con una arraigada tradición parralera. El resto del material sigue conservándose in situ.